9.8.11

Julieta Capuleto y yo (Historia de amor)




Lo reconozco, cuando caí rendido a los pies de la pobre chica, no me atreví a tocarle la parte "noble" que todo el mundo ansía palpar. Me conformé con asir su muñeca y sentir el frío que desprendía. La tragedia que desencadenó su enamoramiento de Romeo Montesco aún despide el frío de la muerte. Muy valiente la postura de la pareja que no pudo hacer valer, desgraciadamente, el amor y el proyecto de convivir por encima de odios. Estos pudieron con la pareja. Aquel ya lejano 10 de septiembre de 1984, a la caída de la tarde, en la casa de Julieta de la véneta Verona, mirando a la mujer que me estaba disparando la cámara fotográfica juré que a mi nunca me ocurriría nada que de lejos se le pareciese. Hoy, casi veintisiete años después, nada ha cambiado. Julieta sigue en su sitio -manoseada hasta la nausea por miles de turistas- y yo en el mío. Gracias, Julieta!


Julieta, hoy, manoseada sin sentido

8 comentarios:

  1. Evidentemente, la promesa que te hiciste a ti mismo te fue mucho más útil que manosearla. Si alguna vez voy a visitarla, me acordaré de ti.
    Me alegró verte por mi casa.
    Un afectuoso saludo.

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  2. Mercedespinto
    ... pero el tocarla ayudó a formularme la promesa, luego de algo sirvió. Si vas a Italia, debes visitar este palacio. Y el de enfrente.
    Gracias por tu bienvenida.
    Un beso, amiga!

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  3. "cuando caí rendido a los pies de la pobre chica"

    Te refieres a que caíste rendido de cansancio, como todos los turistas.

    No se por que, pero te noto algo nostálgico, sacando del baúl de los recuerdos, los mismos.
    ¿No sera por la jubilación?

    un abrazo

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  4. Me gusta mucho tú promesa y la foto de tú mano en su muñeca. Una cosa es poner tú mano en su muñeca y otra cosa es manosear.Estoy segura de que tú intención no fué manosear sino sentir... y eso denota tú sensibilidad.
    Por cierto!! El 10 de Septiembre es una bonita fecha y de 1.984 más pues eras muy joven y yo también....
    Un beso.

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  5. Pedro
    caí rendido pero, aunque algo cansadillo, era de emoción.
    No creas que saco los recuerdos por nostalgia mal entendida, sino que tenía montones de diapositivas de mis primeros viajes a Italia y cuando las he digitalizado me he dado cuenta del rico tesoro gráfico que tengo. Y cada foto es para mí, una historia que soy capaz de relatar, aunque no quiero meter rollos. Y esta es especial para mi, de verdad.
    La jubilación no tiene nada que ver... estoy jubilado y jubiloso!!!

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  6. Anónimo
    he querido decir que yo NO manoseé a Julieta (especifico que fueron miles de turistas hasta dejar su "piel" como la expongo en la foto pequeña actual, mate, desvaída, grasienta).
    Por supuesto que no acostumbro a "manosear" sino a posar mi mano en la piel, a palpar, a acariciar...
    Me alegra que hayas captado mi sensibilidad, que efectivamente creo poseer.
    En 1984 era joven, pero trato de mantenerme así, al menos de espíritu.
    Otro beso, anónimo

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  7. Hola José Antonio, parece ser que con la cantidad de fotos tendrías para publicar una por día y te faltarían días. Pienso como el comentario anónimo el tocarla fue además de respeto hacia lo que supone el personaje, las sensaciones que producía en tu interior y el estar en ese sitio tan especial. Lo de la jubilación siendo como pareces tan activo, esta te traerá nuevas experiencias.
    PD: Te agradezco mucho que visites mi blog con tanta asiduidad y que te atrevas a dejar comentarios. Ya he corregido el "desliz" ortográfico de "A" pasado, a veces hay despistes que duelen los ojos con ellos. Muchas gracias.
    Por cierto tu fuente rss o atom están bien configuradas?? es que cuando realizas una entrada no se me actualiza en mi escritorio de blogger.La última que tengo de tu blog es de hace un año. Un Abrazo

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  8. Pepe
    Cada fotografía que tengo, me sugiere un comentario. Esta foto fue especial, en su momento, y al verla de nuevo quise hacer un alegato -íntimo y personal- contra las intolerancias.
    Es un pequeño mensaje que he dejado ahí... y Julieta me vino al pelo para formularlo. Cosas de escritores que usan(mos) cualquier recurso.
    Lo del desliz es muy normal, y tengo la costumbre de que no se me va casi ninguno (propio o ajeno).
    En cuanto a lo de las actualizaciones, lo sé desde hace mucho tiempo y no tengo narices de corregirlo, así que sé que mucha gente no me visita por no enterarse de cuándo publico. En fin, me resigno... pero haz lo que yo, visito a mis amigos para saber si actualizan sus espacios o no. Total, tanto no cuesta, de todas formas no me doy por vencido y trataré de solucionar este problemilla que me supera.
    Un saludo, amigo, y seguiré visitándote aunque tampoco me entere de tus entradas.

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