Después de haber chateado varias veces con Rosalía (no sé si es su verdadero nombre) y confesarme que me estaba hablando desde una aldea de Mozambique, y que el motivo de estar allí es que es la enfermera /directora de un dispensario para enfermos del sídrome de Kaposi (vaya, leprosos, en una palabra) he decidido poner una crucecita en mi declaración de la renta...
...para fines de la Iglesia católica. Si parte va a que algunos monseñores, purpurados y vaticanos se den la gran vida, lo daré por bien empleado siempre que otra parte de mi donación llegue al dispensario de Sor digamos Rosalía Andinaveitia, de la Congregación, según ella, de las Clarisas de Palencia.
Suerte, Sor Rosalía, amiga, y gracias por su sacrificio y porque justifique nuestro bienstar cuidando a esos pobres enfermos.
PS. Y a ver si retorna para volver a chatear...
Suerte, Sor Rosalía, amiga, y gracias por su sacrificio y porque justifique nuestro bienstar cuidando a esos pobres enfermos.
PS. Y a ver si retorna para volver a chatear...
12 comentarios:
Amigo, apoyar una buena causa como esta siempre es gratificante, además de que uno lo percibe como una obligación moral, no como una caridad. La verdad yo desconfío mucho de la iglesia, pero causas como estas son de verdad admirables, loables y que merecen la pena apoyar y darlas a conocer.
Sin duda un ejemplo de amor a los demás.
Un beso cielo, perdón por estar tan perdida.
si me deja este programa automatico telematico, telelioso y complicadisimo que me suministra el recaudador real, intentare poner la crucesita. ya lo he conseguido algunos años,pero otros se resistia.
un abrazo
Jose Antonio, te recibo con placer en mi blog. Yo, creo que todos tenemos algo que decir, y sobre todo tenemos derecho a tener voz.
La labor humanitaria de ONGs y religiosos, es invalorable. Yo, los admiro, y probablemente, si la vida me hubiera dado una oportunidad de vivir de otra forma, yo también estaría muy implicada en estas labores.
Sin embargo, sabrás que el Gobierno Español , al margen de las X en la declaración de la renta, guarda de su presupuesto, miles de euros para una iglesia, que a pocos acoge, y no lo hace precisamente pensando en que son pobres y lo necesitan. La pena es,todos esos religiosos, que sí entregan su vida de verdad aquí y allá, y poco tienen que ver con esa "iglesia" que menos pueblo es cualquier cosa. Lástima, porque ellos sí son IGLESIA.
Saludos entrañables, para un ser sensible.
Me gusta ver las fotos de la gente en sus blogs. Gracias por las tuyas.
Lunska: me refería a ESA iglesia.
A esa monja, esos misioneros que dejan todo atrás y se dedican a los más pobres entre los más pobres del mundo.
Luego están las oenegés que también. A una de ellas contribuyo mínimamente para que ayuden actuando en otros lugares. Pero es otra cosa.
A cada cesar lo que es de cada cesar...
Gracias, por otra parte, por tus calificativos. A mi, y a quién no, me encanta mirar y curiosear por los agujeros que hacen los demás, adrede, en sus espacios vitales. Así que, ya sabes, en tu espacio no sólo se te puede ver, sino escuchar...
Gracias, amiga, y un beso con afecto
No tenía ni idea de que hoy era el Dia Mundial contra la lepra.
Hace unos días incluí esta entrada en mi blog. Pero dada la cisrcusntancia y la casualidad, he querido remover la entrada y sus amables comentarios para actualizarlos en la fecha más indicada, hoy 31 de enero.
Gracias a tod@s
Esta labor es digna de admirar... ¡¡Eso si es usar con buena causa la religión!!
He de reconocer que a pesar de mi ateísmo, admiro estas estupendas labores a los desfavorecidos; como las que desempeñó nuestra querida María Teresa. ¡Hay que intentar ayudarles todo lo posible! Esa es la verdadera gratificación...
Un saludo, Aura :)
Aura
No cabe ninguna duda de que existen muchas personas como la hermana Rosalía, desinteresadas, como existen ONGs y cooperantes que dan su existencia para ayudar a los olvidados del mundo. Por eso yo me niego a condenar porquesí a la Iglesia católica. Me niego a ver blanco o negro. Hay una escala de colores infinita. Y cada persona es un mundo.
Cuanto más información tengo, más convencido estoy de mi agnóstica equis.
PD: en la Declaración de la Renta -que cuando seas mayor también habrás de cumplimentar-, hay un apartado donde puedes derivar un pellizco de tus impuestos para unos fines u otros. Afortunadamente, con absoluta libertad.
Un beso :))
Mi crucecita sería fija a la Iglesia si se me desmostrara que mi aportación va realmente a la gente necesitada. No me vale con que vaya una parte, si la doy es para que vaya enterita... que hace mucha falta a mucha gente.
La iglesia tiene dos caras, la buena y la mala....pero a veces cuesta distinguirlas porque la mala eclipsa a la buena.
Beni
Muy respetables todas las opciones. Por mi parte, no me considero de piñón fijo, pero qué hacemos con los olvidados de los olvidados mientras dilucidamos si nuestros impuestos son bien empleados? Y digo impuestos, que me gustaría, siguiendo tu tesis, que se emplearan en su totalidad en prestaciones sociales (Sanidad, Enseñanza, Empleo, etc.) y ni un sólo euro para Defensa, Exteriores, y otras asignaciones inútiles o superfluas...
Así pues, por mi parte, y por ahora, el fin justifica mis (pobres) medios.
Me parece tan nuevo y brillante este look, que dicen los guiris. Que he leído esta entrada sin parecerme que ya la había, hasta comentado.
buenos cambios
Pedro, esta entrada es atemporal, o sea, siempre está de actualidad, por desgracia.
La volví a incluir para que sirviera como contrapunto a la llegada del Papa. Y es que yo me quedo con la parte de la Iglesia que tan dignamente representa Sor Rosalía. Para mí, es suficiente.
Gracias por comentarla una y otra vez, amigo.
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