12.10.09

CARTA ABIERTA


A SIMÓN BLÁSQUEZ ZAMBRANO
HUELVA, 12 Octubre 2009
Aprovecho la Fiesta Nacional de España para escribirte, rememorando  que hace 517 años, desde acá, en esta orilla de la “Mar Océana”, unos hombres, embarcados dos meses antes, llegaron a la orilla occidental donde ya habitaban tus antepasados, y se encontraron, para bien o para mal -la Historia desde entonces lo va manifestando día a día- y, unidos y mezclados, extendiéndose,  formaran lo que hoy es tu inmenso y rico, y complejo, continente.

Con esta carta, pensada y escrita en nuestro común idioma, fruto de aquel encuentro -permíteme que otros la puedan leer- quiero contarte y reflexionar sobre algunas cosas, breve y sencillamente, que hoy igual te suenan extrañas, pero quizás, algún día, te hagan pensar.
Sé que tu país, Ecuador, es uno de los más pequeños de América del Sur. Que treinta y cinco de cada cien personas viven en la pobreza -el Gobierno ecuatoriano anuncia que no podrá  devolver todo el dinero recibido en préstamo, y los ricos (el F.M.I.) tienen miedo de que cunda el ejemplo- ; que cuarenta y cinco niños, de cada mil, no llegan a cumplir su primer año ; y que la Naturaleza desatada, en forma de volcanes, -hace unos días entró en erupción el Pichincha- o maremotos -el Niño- se ceba en tu país. Como casi siempre, con los más débiles.
Tengo conocimiento de que el cantón Pedro Carbo es una zona agrícola por excelencia, pero con una pobreza creciente, donde sólo disponéis, como renta, de 70 dólares al mes, por persona; con un suelo  rico, degradándose progresivamente debido a la agricultura incontrolada y a la deforestación generalizada.
Tengo noticias de que tu comunidad, Recinto Bachillero, sufre otros problemas, aparte los ya enumerados, relacionados con la Salud y la Educación que se encuentran en niveles aún básicos y, así, estoy enterado de  que muchos habitantes de tu comunidad, y de los alrededores, han de emigrar  a otras ciudades como Guayaquil o Quito.
Pero sé, asimismo, que no estáis parados, sin hacer nada, ni mucho menos ; que con ayudas, por ahora absolutamente necesarias, los mayores de tu pueblo están llevando a cabo proyectos capaces de aprovechar racionalmente los recursos naturales y humanos, para que podáis contar con los medios de acceder a una vida digna y normal a la que tenéis derecho, en temas de Producción, Salud y Educación.
Y aprovecho esta carta abierta para desearte un feliz cercano cumpleaños ; te pediría que no faltaras a clase de tu Escuela Roldós Aguilera 29, aunque imagino que algunas veces ayudas en las tareas agrícolas a tus papás, a quienes me gustaría saludar algún día. También me agradaría, Simón, que continúes escribiendo y cuentes cosas de tu pueblito, de ti, si continúas jugando al fútbol. Te imagino cambiado y convirtiéndote en un apuesto jovencito ; envíame más dibujos, como el de la última carta recibida hace seis meses, donde representas tu casa  elevada del suelo por medio de cuatro gruesos postes de madera, supongo que para evitar la humedad.
¡Feliz once cumpleaños! !                                    
José A. Bejarano



3 comentarios:

  1. Bejarano, me ha gustado la carta pero ¿quién es Simón?.
    Hace tiempo que no escribo, no tengo tiempo. Como sabes estoy trabajando gracias a la nueva medicación que hace que me encuentre algo mejor. Espero readaptarme al ritmo de trabajo y publicar de vez en cuando algo.
    Un beso

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  2. Pienso que decir y no se, despues de leerte.
    Siempre das en el clavo, que nos clava y normalmente duele.
    Supongo que Simon es tu protegido, si asi es, suerte tiene el de tener un padrino que escribe del tal forma.
    Un cordial saludo, amigo.

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  3. Para mis amigos Carme y Pedro:
    Simón podría ser uno de los millones de niños que viven en el 3º mundo.
    Sin ninguna culpa.
    Gracias por vuestros amables comentarios.

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